Conclusiones.

Conclusiones.

Antes de crear un proyecto de intervención, resultado de la investigación educativa, conviene determinar los aciertos y los errores de las metodologías  y de los involucrados en la acción, objeto de estudio, con el fin de que en el futuro la enseñanza-aprendizaje de la escritura tengan éxito.
Se debe pensar a la escritura más allá de la construcción de palabras u oraciones con una correcta ortografía. La salida está en trabajar en el aula la producción de textos desde su sentido más complejo, en el que no solo se dependa de la construcción de estructuras textuales o de escribir por escribir, se trata de buscar que el alumno entienda la funcionalidad de la escritura, que piense en su receptor del mensaje, que involucre sus habilidades de pensamiento desde el momento mismo en el que se está pensando en el texto mismo. Es decir en qué, por qué o para quién se va a escribir.
El manejo de situaciones de aprendizaje para la enseñanza de un contenido en específico, es una clara muestra de agotar los recursos para generar aprendizajes significativos; y es que, aunque en mucho de los casos los recursos tecnológicos están al alcance de las personas, muy poco se ha enseñado a emplearlas de forma adecuada o para fines educativos.
En el ámbito educativo la innovación y  la posibilidad de mejorar los aprendizajes de los educandos radican en el uso adecuado de los recursos tecnológicos en el aula con fines pedagógicos. Por lo que las competencias docentes en el ámbito de las TIC requieren de profesionales que modelen la forma de actuar frente a las demandas existentes del siglo XXI, es decir, manejar de manera adecuada los recursos tecnológicos para la mejora de los aprendizajes. 
No obstante, en muchos de los contextos, la realidad se desfasa por mucho al compararla con el discurso político. Como docentes, no  se puede dejar  que los obstáculos, a los que ya estamos acostumbrados a capotear, sean la barrera para que nuestros alumnos formen parte de la sociedad del conocimiento.
La enseñanza de la escritura debe ser en este sentido, el mejor aleado para combatir las brechas del conocimiento, la desigualdad social, la solución de muchos de los problemas sociales; y es que, no hay mejor medio que pase a la eternidad intangiblemente, que la escritura.
El aprendizaje de la escritura, debe mirarse como proceso complejo en el que intervienen el desarrollo de múltiples habilidades, entre ellas el uso adecuado de las reglas ortográficas, que deben enseñarse en su sentido más amplio y en situaciones de aprendizaje, en un contexto en el que el alumno sea quien descubre el conocimiento. 
En este sentido, además de las dificultades contextuales a las que por mucho que se les atribuya el resultado de la propuesta de trabajo; también influyeron algunos otros problemas que obstaculizaron el desarrollo eficaz de la propuesta de intervención.
Primero, habría que hablar sobre la selección del objeto de estudio, quien al no ser un tema nuevo, pero si basto en investigaciones y propuestas didácticas, se indagó en todas direcciones posibles, a modo de encontrar alguna variable que no se hubiese analizado con gran magnitud, se buscó en todo momento innovar y crear conocimiento nuevo.
Por otro lado, la planificación de la situación de aprendizaje fue el elemento central para el desarrollo eficaz de la propuesta de intervención, pues fungía como el momento a partir del cual se desencadenarían una serie de acciones  para el logro de los objetivos.
Finalmente, los recurso tecnológicos empleados, aportaron tanto en el trabajo administrativo llevado a cabo por el profesor, en el sentido que se pudieron organizar los resultados obtenidos mediantes los instrumentos de evaluación; como en lo pedagógico, ya que las proyecciones, presentaciones interactivas o las infografías aportaron dinamismo a la forma en como se venía enseñando.  

En cuanto a los docentes, mediadores de los aprendizajes, Se debe proveer a los docente de herramientas que les permitan el desempeño de su labor de manera eficaz, de debe apoyar con materiales digitales y actualización en la que más que se les hable de qué enseñar, se les oriente en el cómo y por qué enseñar. En el que sea el maestro mismo quién descubra sus potencialidades y áreas de mejora. 

Comentarios